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EL NIÑO TREPADOR

Mientras mi reencuentro con el sujeto encandilador se hace esperar, yo me sigo entreteniendo con mi mente.
Siguiendo la consigna de Susana Giménez “Puedo vivir sin hombres pero nunca sin amor” ando por la vida imaginándome como sería mi vida al lado de cada sujeto que se me cruza por la calle, cada cliente que pasa por el local, el amigo de mi amigo, el hermano de mi amigo (y viceversa) y así hasta culminar en alguien de la familia. Ahí es donde hago un stop mental y vuelvo a empezar desde el principio porque considero que imaginar y delirar no siempre quieren decir lo mismo eh!.

Anoche fui al mercadito chino (frente a mi edificio) a comprar cotonetes, y como no podía terminar el día sin que me pase alguna desgracia, era obvio que si no se me caía un pedazo de mampostería del techo, se cortaba la luz o algo siempre me pasa. Por fortuna fue lo segundo, por desgracia fue justo cuando estaba a dos personas de la caja fuckkk. El chino tardó como veinte minutos en apretar el botoncito que dice ON del grupo electrógeno, asi que me quedé quietita en la fila y atenta para que nadie se me cole. En la espantosa espera siento como que algo se me trepa y se queda prendido a mi pierna. Intento sacarlo. No puedo. No veo. Pensé: será un perro? un niño perdido?? o peor un chino agonizando!!!. Al minuto llega la luz y efectivamente era lo segundo. Un niño de dos o tres años aproximadamente que me mira, me desconoce y obviamente se aleja asustado y casi llorando. Al rato lo veo venir de la mano de un chico que tendría masomenos veintisiete años, alto, bien vestido y con un tatuaje tribal en el brazo. Se enfila detrás mio y lo veo más de cerca. Morí de amor cuando al fin veo sus ojos… en esa pausa de miradas, me percato y me custiono: HOLAAA ..tiene un hijoooo!!! ¿en que estabas pensando??. Me voltié hacia la caja (ya era mi turno). El niño se me prende e intenta treparse nuevamente de mi pierna. Pero que maderfaquer!. A todo esto el chico lo miraba pero no hacía nada. Indignada le digo: -Disculpame pero no puedo caminar si tu hijo me tiene prendida- Enseguida me retruca: –Te pido perdón, no me di cuenta, es que por ahí te ve parecida a mi hermana, su mamá.- Y en ese momento cientos de preguntas bloquearon mi mente: Me habló o lo soñé? que soy parecida a su hermana?? entonces no es su hijo? Aumentaron las Frutigram!!???
Lo miré fijamente para ver si no estaba soñando, y salí con mis bolsas hacia la calle. Me hago la boluda y hago tiempo con el celular, mientras espero que salga para ver en que auto se va (no es que sea interesada pero habla mucho de una persona). Al rato sale con “el niño trepador” y me saluda. Lo saludo. FIN.
Ahí terminó la historia. Bu que aburrido :(

Pero resulta que llego a casa, dejo las bolsas y me acuerdo que ando sin cigarrillos. No quería volver a salir. Maldigo. Maldigo otra vez y salgo corriendo al kiosco antes de que cierre. Llego a la puerta y PLAFFF!!! me llevo puesto al supuesto "tío" de "el niño trepador". Me cagué hasta las patas. Me pidió disculpas y le pregunté si buscaba a alguien del edificio, me dijo que no. Pero que le gustaría tomar algo conmigo. La duda fue breve. Acepté, total no tengo nada que perder. Hablamos un buen rato en mi vereda dentro de su auto, él, yo y… “el niño trepador”.
Nos caímos bien y quedamos en vernos en la semana para tomar algo y conocernos mejor, pero sin su sobrino. Obvio.

PD. No compré los cigarrillos.

File: H.Rousseau L'Enfant à la poupée