Una y cuarto de la madrugada. Frío, niebla y yo todavía no desayuné… miro de reojo la carpeta de dibujo, la campera, las llaves y la puerta, es que aún no decido si ir a clases o no. Pienso que por ahí es un poco tarde para salir a comprar cigarrillos y cotonetes. Pienso que sería de mis obligaciones si hoy fuera ayer y yo no hubiese amanecido. Qué tan importante es lo que hago y dejo hacer? Suspendida en el tiempo irreal, mirando líneas y puntos en la tercera pared de mi cuarto, la más vacía, la más fría y estúpida de todas las paredes. La TV encendida. Un montón de personas pequeñitas y ridículas adentro de una caja. No saben enseñarme, me hablan de cosas que no puedo entender. Control remoto. Control mental. Dibujos animados. Creo que ahora si hablamos el mismo idioma. Me pregunto si afuera hace frío o calor. Tendría que encender la estufa o el ventilador? Objetivo exploración en la cornisa de la terraza y yo todavía en pijamas. Inmediatamente bajan los recuerdos carnales de mi men...
si no sabes adonde vas, cualquier camino sirve